En las siguientes líneas veremos una serie de habitaciones juveniles de inspiración clásica que nos serán de ayuda para crear ese espacio lleno de elegancia y distinción que buscamos para nuestros hogares.
Por supuesto éstos no son estrictamente clásicos, ya que entendemos que estas habitaciones deben mostrar parte de ese espíritu juvenil que nuestros hijos tienen, pero sí son espacios elegantes, sobrios y discretos que siguen las trazas de la decoración clásica.
Cama con ruedas para un dormitorio dinámico
La cama con ruedas y una animada ropa de cama son las pinceladas más animadas que podemos encontrar en esta habitación de colores neutros y detallismo sobrios. No obstante no estamos ante un dormitorio falto de personalidad, gracias al dinamismo de su mobiliario.
Dormitorio en tonos marrones y verdes
El marrón es el color dominante en este dormitorio juvenil, animado por el verde escogido para dos detalles tan importantes como la ropa de cama y la alfombra. Y la fuerza de estos dos colores se ve suavizada, por supuesto, por la acción de la gran presencia del color blanco, tercer color elegido que no podía faltar.
Habitación para hermanos en tonos pastel
Este habitación para dos es un buen ejemplo de cómo una habitación en tonos pastel puede influir positivamente en el descanso. El techo se ha pintado de blanco para restarle un poco de fuerza al color, mientras que la ropa de cama se ha elegido en color marrón para darle personalidad a la pieza, que de otra manera quedaría muy fría.
Habitación en marrón, blanco y gris
La regla del uso del color marca que como mucho debemos utilizar tres colores en el interior de un espacio, y esa regla marca el estilo de este sensacional dormitorio juvenil.
Como verás los muebles con estructura y tiradores en marrón y frontales en blanco recuerdan ligeramente a las teclas de los pianos. El resultado es totalmente premeditado, ya que la colección de muebles recibe ese nombre.
Dormitorio para chica en malva y blanco
Este dormitorio nos da un maravilloso ejemplo de la elegancia que podemos obtener combinando los colores blancos y los malva. El rosa es el color tradicional que se asocia con las chicas, pero el malva es una variante de éste mucho más adulta, señal de que nuestra hija ya ha salido de la infancia y se está acercando a la madurez.
El color malva lo encontramos como color de base, mientras que el blanco se ha convertido en el complemento perfecto, pudiéndolo encontrar en todo el mobiliario de la pieza. Existen pinceladas de rojo en pequeños elementos para darle un toque de dinamismo a la pieza, para que el espacio no quedara demasiado frío o impersonal.
Habitación rockera en marrón y beige
Excelente ejemplo para demostrar que el estilo clásico no está reñido con el espíritu adolescente. Y es que esta habitación de un adolescente amante de la música rock como demuestra su guitarra descansa en un dormitorio clásico basado en tonos marrones y beiges.
Paredes en marrón muy claro y los muebles en beige son las claves de este dormitorio juvenil. Las pinceladas de color nuevamente las encontramos en rojo, color que como vemos también combina bien con estos tonos. El suelo en color muy claro le quita fuerza al efecto de los colores.